Reparemos la Caja de Cambios

Como es sabido, según el uso que se le dé, los hábitos de conducción y la frecuencia de mantenimiento de un vehículo, su vida útil y la de sus componentes puede reducirse o alargarse, y la caja de cambios requiere que estemos atentos al momento que necesite ser reparada o reemplazada. Las fallas de la caja de cambio no impiden que el vehículo continúe andando, pero debemos conocerlas para realizar su reparación.

1. El cambio presenta ruido extraño en su funcionamiento normal

Es un ruido molesto que se intensifica al efectuar determinadas marchas. Sus principales causas pueden ser:

● Juego excesivo entre engranajes; si la caja de cambios no se lubrica adecuadamente, o no se tiene el debido cuidado al cambiar de marcha, el desgaste natural de estas piezas se acelera y dejan de trabajar de manera óptima.
● Desgaste en los cojinetes; la falta de mantenimiento y la mala lubricación los desgastan. Para solucionar el problema, es preciso desmontar el cambio, abrirlo y reemplazar las partes averiadas -ten en cuenta que siempre se recomienda utilizar repuestos originales-.
● Desalineación de los ejes; si las tapas de los soportes del cambio se encuentran flojas, pueden desalinearse. En ese caso hay que apretarlas.
● Aceite sucio: si se presenta esta situación es necesario cambiarlo inmediatamente para evitar daños mayores.



2. Dificultad al engranar las marchas Este problema se detecta con facilidad porque los cambios nunca deben entrar forzados. Consideremos lo siguiente:
● Deformación del mecanismo de mando; suele alterarse por el mal uso y/o la falta de lubricación.
● Mal estado de los manguitos; es necesario desmontar el cambio y examinar los mecanismos de mando, pues cualquier falla en los manguitos de introducción de las marchas puede generar este problema.
● Utilizar un aceite inadecuado; hay que guiarse por las características recomendadas por el fabricante.



3. La marcha se desengrana por sí sola

Este es un síntoma evidente de que es necesaria una reparación caja de cambios. Suele presentarse cuando los componentes de mando están en un estado deficiente (horquillas, muelles de retención, anillos sincronizadores, etc.). Por lo tanto, es indispensable desmontar todo el sistema y examinar su interior para encontrar las piezas desgastadas y sustituirlas con repuestos caja de cambios adecuados.

Fallas en caja de cambios automática

Detectarlas es algo más complicado, pues se manifiestan menos síntomas.

1. Las marchas patinan cuando se intenta cambiar
Este problema se debe a una mala lubricación. Por lo tanto, hay que reponer el nivel de aceite hasta el límite marcado por el fabricante, o cambiarlo si se encuentra muy sucio.

2. Aceleración deficiente a bajas velocidades
Esto sucede cuando el convertidor de par se avería e impide que el rodamiento unidireccional del reactor funcione. Para solucionar el problema, hay que reemplazarlo.

3. No se realiza el cambio de marcha
Generalmente se produce cuando hay un mal ajuste del mando, o se presenta una avería en alguno de los componentes del sistema. Si al cambiar el aceite o instalar los repuestos caja de cambios nuevos el problema persiste, se debe verificar el embrague.



Por Rogelio Dell’acqua